PRINCIPALES PLAGAS Y ENFERMEDADES DEL OLIVO
Uno de los cultivos más afectados por la presencia de plagas y enfermedades son los olivos, y es deber de cada agricultor conocer las causas y tratamientos de cada una de estas enfermedades.
Al conocer las principales plagas y enfermedades del olivo, será más sencillo evitarlas o atacarlas a tiempo para poder mantener la salud y productividad del cultivo de olivos.
Principales enfermedades del olivo
Entre la cantidad de enfermedades que pueden afectar al olivo, las más comunes y que causan mayores daños son el repilo, aceituna jabonosa y verticillium (causadas por hongos) o la tuberculosis y la Xylella Fastidiosa (ocasionadas por bacterias):
Aceituna Jabonosa del olivo
Este hongo ataca directamente al fruto del olivar, salvo en algunas ocasiones, que ataca las hojas. Su aparición se da al inicio de las lluvias de otoño y su característica física más notable es la aparición de una gran mancha en las hojas; si se da en el fruto, el resultado es un abultamiento de la zona con la segregación de sustancias de color pardo o naranja.
Esta enfermedad ocasiona pérdidas en la cosecha, además de disminuir la calidad del aceite y un debilitamiento en el olivo.
Por lo general, para tratar esta enfermedad se aplican sulfatos cúpricos y cobre, y se cortan las partes afectadas. En el caso de los tratamientos de prevención, es necesario asegurarse de que las condiciones ambientales no permitirán la propagación del hongo.
Escudete del olivo
Esta enfermedad ocasiona manchas en las aceitunas; aunque no se desarrolla o extiende con facilidad, puede modificar el sabor final del aceite, por lo que es preciso actuar con inmediatez para contrarrestar dicha enfermedad.
Una de las causantes de su aparición es la mosca del olivo; por lo tanto, para eliminar tanto la plaga como la enfermedad, se pueden aplicar tratamientos fitosanitarios, técnicas de trampeo o fungicidas cúpricos autorizados.
Tuberculosis en olivo
Esta es una de las enfermedades que más ataca a los olivares en España, y es producida por bacterias que se instalan en los árboles y ocasionan heridas tanto en el tronco como en los tallos.
Sus características visibles son el desarrollo de tumores en ramas, del tamaño aproximado de una avellana, y sus consecuencias son la muerte de brotes, ramas y el debilitamiento progresivo de los árboles; además, altera el sabor de la aceituna.
Para tratar esta enfermedad se deben eliminar las ramas que tengan tuberculosis, así como aplicar tratamientos ecológicos de cobre como los utilizados contra el Repilo.
Repilo en olivo
Otra de las enfermedades más dañinas y comúnmente conocidas, que es ocasionada por un hongo que afecta la capacidad reproductiva del árbol.
Es tan peligrosa porque gran cantidad de variedades son sensibles a ella y a los climas lluviosos (que es cuando se produce); por lo tanto, los mejores tratamientos son los tratamientos de cobre poco antes de que lleguen las primeras lluvias en otoño, así como la aplicación de fungicidas en primavera.
Otra forma de evitar su propagación es retirar las hojas contaminadas que caigan al suelo.
Verticilosis en olivo
Esta es una de las enfermedades más difíciles de tratar; el causante es un hongo de suelo que produce resequedad en el olivo y hace que se necesiten acciones severas como buscar nuevos suelos, no afectados, o portainjertos para volver a plantar olivares enteros.
Para evitar que se difunda esta enfermedad, se pueden realizar tratamientos como la poda, quema y sustitución de olivos que hayan sido afectados, así como limpiar las herramientas que hayan tocado el área contaminada. Actualmente, existe un producto autorizado para la eliminación de esta enfermedad: el Bioten.
Xylella Fastidiosa en olivo
En Italia es conocida como ébola del olivo y en España fue detectada a finales del 2016.
Hasta ahora, no ha ocasionado daños considerables respecto a la producción mundial; sin embargo, también es una de las enfermedades más preocupantes debido a que no existe tratamiento para erradicarla, únicamente, eliminar las zonas afectadas del olivo.
Negrilla en olivo
También se le conoce como fumagina o tizne y es producida por un hongo que afecta a gran cantidad de plantas y cítricos. Las consecuencias en el olivo son la reducción de la actividad fotosintética necesaria en el árbol, debilitándose y disminuyendo su producción.
La causa de esta enfermedad se basa en que el hongo no permite que las excreciones de los insectos chupadores de savia nutran la planta. Para tratarla, se puede aplicar cobre o, para mayor efectividad, tratamientos cúpricos en estaciones con temperaturas moderadas.
Acariosis en olivo
Como su nombre lo indica, es una enfermedad ocasionada por la actuación de cuatro especies de ácaros diferentes, que miden de 0.1 milímetros a 0.35 milímetros.
Al ser una enfermedad secundaria, no suele ser necesario aplicar tratamientos.
Repilo plomizo en olivo
Esta enfermedad es similar al repilo, pero menos dañina; por lo tanto, se considera como una enfermedad secundaria.
Las consecuencias en el olivo son la caída de las hojas y el debilitamiento del árbol.
Para tratar esta enfermedad se pueden aplicar varios métodos: incremento de los marcos de plantación y podas correctas de aclareo, así como tratamientos con compuestos cúpricos; como el óxido cuproso, el hidróxido de cobre o el sulfato de cobre.
También son permitidos tratamientos con sales de cobre, que son más respetuosos con el medio ambiente.
Lepra en olivo
Esta enfermedad es poco conocida, pero más resistente que otras debido a que los tratamientos cúpricos llevados a cabo en otros hongos son menos efectivos en este caso.
Las consecuencias se manifiestan a modo de chancros y debilitaciones intensas en las ramas, así como defoliaciones abundantes en las hojas. Para tratarla se aplican compuestos cúpricos más fuertes, como los utilizados en el repilo.
Podredumbre de la aceituna
Cuando las aceitunas cosechadas permanecen almacenadas por mucho tiempo, esto también puede ocasionar la aparición de hongos.
Para ello, la solución es no almacenar la aceituna; de este modo, el aceite también tendrá una mejor calidad final.
Nemátodo de las agallas en olivo
Aunque esta enfermedad tiene consecuencias muy superficiales en los olivares, es importante controlar su propagación mediante productos autorizados.
En este caso, se pueden utilizar productos como el Tervigo, Sondae, Bencarb, etc. Por otro lado, también se pueden llevar a cabo técnicas de solarización junto a la aplicación de estos productos como el dicloropropeno.
Asfixia radicular en olivo
Se trata de una enfermedad ocasionada por el exceso de humedad en el olivo, la cual puede ocasionar debilitamiento, hojas amarillentas, caída anticipada de las aceitunas, etc.
Para que esto no suceda, lo ideal es mejorar el drenaje o hacer caballones en las zonas más susceptibles.
Principales plagas del olivo
Las plagas del olivo pueden representarse como insectos, nemátodos, etc. Entre los más peligrosos y dañinos, se encuentran la mosca, la cochinilla y el prays; sin embargo, hay más especies a las que hay que prestar especial atención.
Mosca del olivo
Esta es una de las plagas más molestas para los agricultores, ya que hace pequeños agujeros en las aceitunas por los cuales se reproducen diferentes hongos y patologías. El resultado de la acción de las moscas es un aceite muy ácido, no apto para el consumo.
Para determinar la presencia de estas moscas hay que tomar en cuenta su morfología (abdomen elevado en las hembras, machos con 5 mm de longitud y huevos de color blanco/grisáceo). Asimismo, suelen desarrollarse a partir del mes de marzo, con el inicio de la primavera.
Respecto a los tratamientos, pueden aplicarse mosqueros de cristal que tengan disoluciones internas de proteína hidrolizable, así como la aplicación de pulverizaciones en las diferentes áreas afectadas.
Barrenillo del olivo
Este tipo de plaga es producida por un tipo de escarabajo, el Phoeotribus scarabeoides, donde la hembra cava un orificio en el interior de la leña de poda y, posteriormente, se reproduce y debilitan el árbol hasta provocar la caída de las zonas afectadas.
Esta plaga es característica de la cuenca mediterránea y suele aparecer en zonas muy húmedas o muy secas; de hecho, es común encontrarlas en casas de campo donde se guarda la leña.
Eliminarlas requiere de un proceso muy complicado debido a que son insectos de interior; por lo tanto, es preferible prevenir su aparición, evitando conservar los restos de leña de poda.
Polilla del olivo
También conocida como el prays o prays oleae, es una de las plagas más conocidas y dañinas de los olivos. Sus características son como las de cualquier polilla, pero con tonalidades grises.
Su modo de ataque se presenta en varias fases; la filófaga, donde las larvas penetran las hojas, la antófaga, donde las polillas ponen larvas en las flores, y la carpófaga, donde colocan huevos en las aceitunas recién cuajadas. En todas estas fases, la polilla se va alimentando de la planta, ocasionando daños en las hojas, flores y frutos.
Para prevenir su aparición se deben aplicar productos fitosanitarios autorizados.
Algodoncillo del olivo
Este tipo de plaga es representada como un insecto que chupa la savia y otros nutrientes del árbol de olivo, además de que sus larvas segregan una especie de cera de color blanco que cubre las hojas hasta que parezca una capa de algodón.
Al ser un tipo de plaga secundaria, es poco probable que sea necesario aplicar algún tratamiento; sin embargo, para evitar su aparición y proliferación se pueden aplicar tratamientos con productos organofosforados que estén autorizados.
Normalmente, este tipo de tratamientos se realizan si la población existente es de más de 10 larvas.
Cochinilla de la tizne en olivo
Así como el algodoncillo, este tipo de plaga succiona la savia de la planta, pero también excreta una sustancia sobre las hojas que reduce las capacidades fotosintéticas del árbol, el crecimiento de sus ramas y la brotación de sus hojas.
Para contrarrestar y erradicar la presencia de estos insectos se pueden implementar varios métodos, como las podas (para airear las copas de los árboles), las avispas (que acaban con las cochinillas y sus huevos), y la aplicación de químicos en verano.
Cochinilla violeta del olivo
Se trata de un piojo que afecta los olivares de verdeo, produciendo manchas en las aceitunas y disminuyendo su valor comercial. Para prevenir el ataque de estas plagas se realizan tratamientos de control durante las cosechas, como la inserción de otros insectos depredadores o tratamientos fitosanitarios.
Ceramida en olivo
También se le conoce como gusano blanco del olivo y es una larva de escarabajo que se nutre a través de las raíces del olivo. Cuando son de mayor tamaño, ocasionan daños considerables, sobre todo cuando la población es abundante.
La mejor manera de atacar la presencia de estas plagas es en su edad temprana, ya que cuando son adultas es más complicado erradicarlas por la profundidad en la que se encuentran bajo el suelo. Asimismo, en su edad temprana es cuando son más fáciles de atacar porque son más susceptibles a los insecticidas.
Arañuelo del olivo
La Liothrips oleae Costa, también conocida como piojillo negro del olivo, es una plaga poco peligrosa, ya que no causa grandes problemas como otras. De hecho, por lo general, en las épocas más frías, como el invierno, estos insectos no resisten las bajas temperaturas y terminan por morir solos.
Por otra parte, para erradicarlos, también se utilizaban compuestos químicos al inicio del siglo XX que hoy en día no están autorizados; como el lisol, el ácido cianhídrico, las emulsiones jabonosas de petróleo o el zotal.
Abichado del olivo
Esta plaga es ocasionada por una polilla nocturna, también conocida como Euzophera pingüis Haworth, descubierta en 1811, cuyas larvas se alimentan de la corteza del olivo hasta debilitarlo por completo.
En este caso, el tratamiento para estas plagas deberá realizarse cuando las mismas causan heridas muy profundas en los troncos. Pueden realizarse diferentes tratamientos como el control biológico (sin utilizar insecticidas que dañen las poblaciones parasitarias), así como la reducción de heridas a través de podas, evitar quemaduras solares, unión de injertos, etc.
También se pueden realizar tratamientos o controles químicos, como mezclar aceite de verano e insecticidas organofosforados durante los días menos calurosos. En este caso, se deben aplicar los insecticidas con baja presión, solo en las zonas del tronco y ramas principales. Por supuesto, todos los productos químicos utilizados deben estar autorizados para dicho uso.
Otiorrinco del olivo
Su nombre científico es Cribricollis Othiorrhynchus y fue descubierto en 1834. Este tipo de plaga no causa grandes repercusiones en los olivares; sin embargo, en las fases de desarrollo de nuevas siembras es posible que ocasionen daños considerables, a tal punto de tener que aplicar medidas de control.
En el caso de los adultos de la especie, estos suelen alimentarse por la noche y refugiarse por el día, lo que dificulta un poco su exterminación de las plantaciones.
Los tratamientos que se pueden llevar a cabo para controlar la propagación de esta plaga son diversas; van desde las medidas culturales (como una eliminación temprana de chupones), controles biológicos (con depredadores como arañas, pájaros o ratones), o tratamientos químicos (como mojar el suelo alrededor de los olivos con insecticidas piretroides).
Estas soluciones químicas se aplican para reducir la cantidad de hojas afectadas, y suelen llevarse a cabo en junio, antes del verano, o en septiembre
Glifodes en olivo
También se le conoce como polilla de jazmín o, como es su nombre científico, Palpita unionalis. Este tipo de plagas afecta el crecimiento de los plantones, por lo que es común llevar a cabo tratamientos de control para evitar su propagación durante las plantaciones de olivar nuevas.
Su tratamiento puede ser a través de controles biológicos, medidas culturales o tratamientos fitosanitarios que ayudarán a hacer frente a esta plaga.
Los controles biológicos se llevarán a cabo a través de diferentes himenópteros, como la Apanteles hemara y la Oomyzus sp. Por otro lado, las medidas culturales son; favorecer la disposición de brotes tiernos para que incremente la disponibilidad de alimentos y, de esta forma, reducir la población de Glifodes y su propagación.
No obstante, también existen algunos factores de riesgo ante estos métodos, como desequilibrar los abonados por la presencia excesiva de nitrógeno, la aparición excesiva de brotes tiernos a causa del exceso de riego en los olivos, o la aplicación de insecticidas que puedan dañar poblaciones de insectos parasitarios, los cuales son los encargados de llevar a cabo los controles biológicos.
Siendo la última de estas, la más perjudicial, este tipo de tratamientos químicos solo deberán llevarse a cabo en caso de que la población de Glifodes hayan causado daños considerables; por lo general, esto puede ocurrir entre los meses de mayo hasta diciembre. Hoy en día, existen tratamientos autorizados con insecticidas.
Preguntas frecuentes sobre enfermedades y plagas del olivo
¿Cuáles son las enfermedades del olivo más comunes?
De todas las enfermedades que pueden atacar la presencia de los olivos, existen cinco enfermedades más comunes:
- El repilo del olivo; que ataca las hojas produciendo manchas en las mismas y ocasionando su caída.
- La negrilla del olivo; que es una infección ocasionada por la presencia de plagas.
- La tuberculosis del olivo; que causa varias afecciones, sobre todo en las ramas de los árboles, donde se forman verrugas que van deblitándolos paulatinamente.
- Aceituna jabonosa; que daña los frutos.
También existen otras enfermedades comunes, como la lepra del olivo, el ébola del olivo y la Xylella Fastidiosa; siendo esta última la más reciente, por lo que aún no se ha encontrado una cura específica.
¿Cuáles son las plagas del olivo más peligrosas?
Como se ha mencionado en la sección de plagas del olivo, existen variedad de plagas, más y menos peligrosas para el olivar, que requieren su debido tratamiento y control de proliferación.
De todas estas, las plagas más comunes son el Prays oleae o polilla del olivo, la mosca del olivo o Bactrocera oleae, y la cochinilla de la tizne o caparreta (Saissetia oleae Olivier).
Asimismo, el insecto que causa la Xylella fastidiosa es una de las plagas más peligrosas para los olivos.
¿Existen tratamientos para olivos ecológicos?
La respuesta es sí. Además, varias de las enfermedades y plagas mencionadas anteriormente son tratadas con medidas ecológicas, como es el caso de la tuberculosis del olivo, a la cual se le aplican tratamientos ecológicos para erradicarla.
Al llevar a cabo tratamientos de este estilo se generan diferentes beneficios para el cultivo; como su mejor rentabilidad, la expansión de la disponibilidad de subvenciones para cuidar y preservar mejor el medio ambiente, la recuperación más rápida de la naturaleza y el mantenimiento de su equilibrio, entre otras.
¿Cuándo se tratan los olivos?
Para llevar a cabo tratamientos fitosanitarios deberán tomarse en cuenta diversos factores. Por lo general, dependerá de la climatología, la salud del olivo y la temporada de recolecta de las aceitunas.
Asimismo, cuando el olivar se encuentra en buen estado de salud, también se pueden realizar tratamientos preparatorios y tratamientos contra el prays.
¿Qué enfermedades del olivo provocan la caída de la hoja?
Entre las mencionadas, en general, existen dos enfermedades que, particularmente, causan la caída de las hojas.
Una de ellas es el repilo que, como ha sido mencionado anteriormente, a causa de la enfermedad que ataca las hojas, con la llegada de la primavera, éstas terminan volviéndose de color amarillo y, posteriormente, se caen. En España, esta es una de las enfermedades de mayor importancia; los ataques son producidos en zonas donde llega menos el sol y más bajas, donde los cultivos presentan mayor sensibilidad a la humedad. Por suerte, la aplicación de fungicidas sigue siendo la opción mayormente utilizada y de mejores resultados.
Por otra parte, la lepra del olivo es otra de las enfermedades que causa más pérdidas de hojas, aunque su principal síntoma es la podredumbre de las aceitunas. Esta enfermedad no es nueva en España, ya que en 2011 se detectó un incremento de casos en la Península Ibérica.
¿Son eficaces las pistolas para sulfatar olivos?
Hay muchos motivos para pensar que las pistolas para sulfatar olivos son, hoy en día, las herramientas más eficaces y rápidas. Razones como la competitividad económica, las exigencias de la agricultura y la presión social por buscar medios para mejorar el tratamiento de los cultivos.
Todo esto ha obligado al agricultor actual a utilizar nuevos métodos; no obstante, es importante resaltar que, aunque estas nuevas herramientas, como las pistolas para sulfatar olivos, son la solución, la respuesta es no. Al menos, no del todo.
Además de esto, también es importante considerar todos los pasos del tratamiento, como utilizar el producto adecuado, la dosis correcta y hacerlo en el momento necesario. A raíz de estas decisiones es cuando influye utilizar las mejores herramientas.